El conseller del PSOE, Joan Marqués, criticó ayer al gobierno 'popular' del Consell por "desistir" de implantar un modelo territorial propio para Menorca y dejar buena parte de ese diseño a expensas de normas autonómicas, estatales y europeas, con una actitud que es la de "ser simples delegados del Govern". "Es un error", afirmó el que fuera conseller de Ordenación de Territorio en el anterior mandato, "porque la razón de ser del Consell es precisamente traducir toda esa normativa para crear un modelo adecuado a Menorca".
Marqués avanzó así que, pese a compartir el objetivo de reactivar la economía, el PSOE votará en contra de las modificaciones del Plan Territorial Insular (PTI) que plantea el PP, porque éstas implican renunciar a "cualquier referencia a cuestiones propias". Las modificaciones se presentarán por el Grupo Popular como enmiendas en el Parlament balear, durante la tramitación del decreto ley 2/2012, de 17 de febrero, como proyecto de ley.
El conseller de la oposición recordó que es sin embargo ese modelo territorial propio el que genera demanda turística y se presenta en los mercados; además, Marqués recalcó que "detrás de la realidad territorial de Menorca hay sensibilidades y sentimientos" y añadió que la viabilidad económica "no pasa por incrementar la ocupación del suelo".
"En clave mallorquina"
Los socialistas consideran que el decreto ley 2/2012 se ha elaborado "en clave muy mallorquina" con el fin de "recuperar terreno urbanizable", declaró Joan Marqués, una solución para una problemática "también muy mallorquina". Según el conseller, la normativa aprobada por el Govern y que ahora se tramita en el Parlament "generaliza para todas las Balears" algunas medidas que afectan a "problemas que en Menorca ya estaban resueltos".
En este punto se refirió Marqués a los núcleos rurales, regulados por el PTI, así como la posibilidad de que los ayuntamientos adapten parcialmente sus planes generales a la norma territorial insular. La transformación en viviendas urbanas de las casas situadas en el campo, en los núcleos que ahora pasarán a denominarse asentamientos en el medio rural, provocarán un "caos" en Menorca, perjudicando, recalcó Marqués, a actividades de ocio que se realizan en zonas rurales y beneficiará a los chalés construidos en este tipo de suelo.