La calle del Ángel se transformó el sábado pasado en una pasarela de moda. La estilista Pilar Garro y su equipo organizaron un desfile de trajes de novia con el objetivo de ambientar la céntrica vía. "Yo vivo en esa calle y sé que es una de las menos transitadas, a pesar de que está en pleno centro. Hablé con los comerciantes y les pareció buena idea, así que nos pusimos en marcha", explica Garro.
La iniciativa contó con doce chicas que desfilaron con sus propios vestidos de novia o con algunos prestados. "Eran trajes de diferentes épocas. Incluso había uno que se usó hace cuarenta años. A las participantes les hizo mucha ilusión volver a llevar sus vestidos", dice la asesora de imagen.
Peinados, maquillaje, tocados... un evento que llamó la atención y que, probablemente, volverá a repetirse.