La consellera de Cultura, Patrimonio y Educación, Maruja Baíllo, afirma que el nuevo Reglamento sobre el Uso de las Lenguas Catalana y Castellana en el Consell "prima valores técnicos por encima de batallas lingüísticas".
La responsable insular hace hincapié en que la nueva normativa que será sometida a la aprobación del pleno de la institución insular el próximo 19 de noviembre, se apoya en tres pilares fundamentales de las leyes españolas, como son la Constitución, el Estatut de Autonomía y la Ley de Normalización Lingüística, frente al anterior Reglamento del Uso de la Lengua Catalana que lo hacía sólo en la Ley de Normalización.
"Cambiamos obligación e imposición por libre elección", remarca Baíllo, quien destaca la "seguridad jurídica" que gana el nuevo reglamento al adaptar su articulado a la Constitución y al Estatut.
"Presión económica"
La consellera insiste en que el objetivo buscado en el nuevo reglamento es defender los derechos lingüísticos de todos los ciudadanos, tanto en castellano, como en catalán, y evitar, entre otras cuestiones, "la presión económica" que sufren, por ejemplo, las empresas de fuera de la Isla que quieren trabajar con el Consell. "Ahora no tendrán por qué traducir los documentos al catalán, pueden presentarlos en castellano. Adaptamos el reglamento a las nuevas leyes que hablan de cooficialidad", resalta.
No obstante, Baíllo, remarca que el catalán seguirá siendo una "herramienta fundamental" de trabajo en el Consell, y explica que el nuevo documento ya ha sido presentado en comisión informativa a los grupos políticos con representación en el Consell. El nuevo Reglamento de Uso de la Lengua Catalana y Castellana en el Consell sustituye a la anterior normativa en esta materia aprobada el 19 de diciembre de 2005. Los cambios introducidos inciden básicamente en la cooficialidad de las dos lenguas frente a la anterior normativa en la que primaba el uso del catalán.