La oficina de Correos de Ciutadella no da abasto. El hecho de tener abierto solo por las mañanas ocasiona largas colas de espera. Cualquier usuario puede percatarse de la situación acudiendo al punto de atención al cliente en la Plaça des Born: gente esperando y pérdida de tiempo para realizar cualquier trámite relacionado con la correspondencia.
La llegada del verano ha agravado las esperas con el aumento de la demanda. La única oficina de la Plaça des Born atiende, solo por las mañanas, la demanda del mayor municipio turístico de la Isla. El lunes, por ejemplo, se detectó una punta con más de 50 personas haciendo cola.
Esta situación contrasta con el servicio que se presta en la oficina de Maó, con un presunto agravio comparativo que ha levantado quejas. A diferencia de la oficina de Ciutadella, que solo abre hasta mediodía, el punto de atención al cliente en la calle Bonaire está abierto durante todo el día hasta las 20.30 horas, para atender una clientela potencial relativamente menor teniendo en cuenta menos peso turístico y que las oficinas de las poblaciones vecinas absorben gran parte de la demanda.
Como dato comparativo, según fuentes consultadas del gremio, mientras por la oficina de Ciutadella sólo durante la mañana se atienden alrededor de 300 clientes, en la oficina de Maó se atienden unos 200 servicios durante todo el día.
Personas conocedoras del sector, aseguran que los recortes sólo han afectado la oficina de Ciutadella. Primero, con el cierre de las dependencias por las tardes y segundo, eliminando dos empleados en la oficina y otros tres en el reparto de la correspondencia.
Hace tres años que la oficina de Correos de Ciutadella solo abre hasta mediodía. En febrero de 2010 un grupo de ciudadanos inició la recogida de firmas contra el cierre de la atención al público por las tardes, al considerar la decisión un paso atrás en la calidad del servicio. La movilización ciudadana no consiguió que Correos atendiera la petición para abrir la oficina de Ciutadella también por las tardes.
El incremento de la actividad ahora con la llegada del verano en la zona de Ciutadella ha hecho resurgir el debate sobre la necesidad de ampliar el horario de atención al público de una oficina que atiende la demanda no solo de la ciudad, también de las urbanizaciones y núcleos rurales.