Los problemas vuelven a Cala Pedrera. Un año más, la calidad del agua de esta ensenada de Es Castell no es la más adecuada para el baño. Aunque los análisis no reflejan ningún parámetro que indique la necesidad de prohibir el baño, sí que se ha recomendado que no se haga.
Como explicó ayer el alcalde de la localidad, Lluís Camps, los últimos análisis realizados por la consellería balear de Salud han detectado unos niveles contaminantes que, sin ser peligrosos, sí que recomiendan advertir a la población . "Sanidad nos ha comunicado de los resultados, y nos ha dicho que avisemos de que es recomendable que no se bañen, pero no lo prohíbe", tranquiliza.
Y es que este problema en Cala Pedrera no es nuevo. De hecho, en años anteriores se atribuía esta contaminación a posibles vertidos desde el Lazareto. "Pero hace dos años que no se le da un uso hotelero, lo cual parece que cierra esa posibilidad", señala Camps, quien recuerda que "el año pasado ya tuvimos que prohibir el baño en Cala Pedrera dos veces".
Inspecciones
El primer edil de Es Castell explicó que el Ayuntamiento ha realizado "batidas para ver de dónde puede venir el problema, pero no se han detectado viviendas con fosas sépticas, parece que todo está conectado a la red de alcantarillado". Así, Camps reconoce que es difícil saber el motivo de los vertidos que ensucian el agua.
Nuevos análisis
Ahora, el Ayuntamiento espera que en las próximas fechas la consellería realice más análisis, para valorar la evolución durante los últimos días. Estos nuevos datos serán los que determinarán si deben continuar las recomendaciones sobre Cala Pedrera, si se ha solucionado el problema, o si por el contrario, debe impedirse el baño por presentar riesgos sanitarios.