Menorca estuvo ayer incomunicada por mar a causa de un fuerte viento del norte que originó un importante oleaje.
Al cierre de esta edición los puertos de Maó y Ciutadella estaban cerrados a la espera de que por la noche mejoraran las condiciones. De hecho, ya por la tarde la alerta por fenómenos costeros pasó de naranja a amarilla, que en principio se mantendrá hasta hoy.
El viento alcanzó rachas de hasta 78 kilómetros por hora en Menorca, provocando olas de hasta 3,5 metros en el puerto de Maó. Las temperturas oscilaron entre los 16 y los 18 grados.
El Servicio de Emergencias del 112 registró numerosas llamadas por el mal tiempo, dos por incidentes en Es Castell y Ciutadella.