El pleno del Parlament rechazó ayer, con el voto en contra del PP, archivar los expedientes abiertos a los tres directores de institutos de Maó que fueron expedientados por el la Conselleria de Educación a consecuencia del Decreto de Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL).
El diputado menorquín del grupo MES, Nel Martí, fue el encargado de defender una proposición no de ley con la que los econacionalistas mostraron su apoyo a los docentes y criticaron que el Govern haya cambiado los motivos de la apertura de los expedientes. «Cambian de argumentos sin mantener el hilo conductor», lamentó, antes de reclamar a la consellera Joana Maria Camps que dimita y que pida disculpas.
En este sentido, consideró que los tres directores expedientados han sido «cabezas de turco» y se preguntó por qué los únicos expedientes abiertos han sido a los responsables de institutos de Maó: «Son expedientes políticos, la decisión política de abrirlos fue de la Conselleria», indicó.
«¿Por qué a tres directores de Maó cuando a otros muchos directores en las mismas circunstancias no se les abrieron?», se cuestionó Martí antes de incidir en que el TIL no se ha hecho para avanzar en el trilingüismo sino en el «monolingüismo».
Por su parte, la socialista menorquina Cristina Rita coincidió con el diputado del PSM en la «arbitrariedad» de los expedientes y explicó que ninguna de las actuaciones de los directores revela acciones tipificadas como faltas.
Rita, quien lamentó la situación por «escandalosa e irregular», consideró que «en algún momento» los responsables de la Conselleria tendrán que «rendir cuentas, aquí o en los tribunales».
Por su parte, la 'popular' Aina Maria Aguiló cargó contra la «demagogia» de la oposición en esta materia al entender que «solo quieren crear conflicto» y explicó que se trata de un proceso «administrativo» y, por tanto, está «muy regulado». «Es impensable que pueda existir arbitrariedad y motivos políticos, solo la ceguera política de la oposición puede poner en duda la independencia del funcionariado», manifestó.
Asimismo, recordó que durante la anterior legislatura también se abrieron expedientes y acusó a los grupos de la oposición de atacar la independencia de los empleados públicos.
La propuesta recogía asimismo instar a la Conselleria de Educación a respetar las competencias de los Consells Escolars de los centros y a aceptar sus decisiones, así como a «recuperar el clima de diálogo necesario» para que colegios e institutos puedan centrar sus esfuerzos en desarrollar con normalidad su tarea educativa.
Durante el debate, MES remarcó que no se puede gestionar la educación «a golpe de órdenes y de instrucciones» y «por encima de la comunidad educativa y de los profesionales» que conocen de primera mano la realidad de los centros educativos.