El Grupo Popular hizo valer ayer su mayoría en el pleno del Parlament para rechazar la moción presentada por el PSOE en aras de mejorar la financiación de las Islas.
La iniciativa, secundada por Més y los diputados no adscritos pero votada en contra por el PP, abogaba por «garantizar las mismas aportaciones anuales del Govern a los consells actualizadas en base al IPC, repercutir a su favor una parte de los recursos adicionales que la comunidad viene ingresando como consecuencia de la mejora de la financiación autonómica aprobada en 2009 y, sobre todo, garantizar que no deberá devolverse ninguno más de los anticipos a cuenta que fueron aprobados en los presupuestos de la pasada y la actual legislatura».
Según las cuentas de Marc Pons (PSOE), 40 millones de euros más que, en caso de gobernar tras las elecciones de 2015, los socialistas se comprometen a restituir -previa modificación de la ley- a favor de los consells insulares.
Pero ayer los presidentes de Menorca y Eivissa sumaron su voto al del resto de diputados del PP para rechazar la propuesta socialista, algo que Pons interpreta como «una afrenta al interés de los menorquines. Santiago Tadeo prefiere seguir los dictados de Bauzá que defender a su propia Isla. Y los menorquines no se merecen los miedos del PP, que es incapaz de justificar su propuesta y se ampara en las mentiras de la herencia, sino que requieren de un Consell insular bien dotado».
Más estable y transparente
La lectura de los populares es bien distinta. Antoni Camps cree que la nueva Ley de los Consells «sí da respuesta a déficits estructurales de financiación de la administración insular, da estabilidad a los ingresos en función de variables objetivas y acaba con el sistema de anticipos, que ahora el Govern se ve obligado a imputar en los presupuestos de manera progresiva, con el fin de ir liquidando así las cantidades que se dejaron de pagar a partir de 2009».
Antoni Camps resaltó que «se trata de un proyecto de ley consensuado y apoyado por todos los Consells, que elimina los convenios de financiación de las grandes competencias, por lo que no dependerá ya de la voluntad del gobierno de turno». Además, «permite participar también en los incrementos de los ingresos de la comunidad y garantiza el principio de suficiencia y mínimos del Estatut d'Autonomia».
El diputado del PP reprochó al anterior Govern del Pacte que hiciera perder en un solo ejercicio, por culpa de su «incapacidad manifiesta», hasta 46,5 millones a los Consells al no aprobar los presupuestos de la comunidad.