La Norma Territorial Transitoria (NTT), que será aprobada inicialmente por el pleno del Consell el día 26, no incluirá la reforma de las Áreas de Reconversión Territorial (ART) ya que la propuesta de legitimar determinadas actuaciones urbanísticas -para evitar indemnizaciones a promotores y a la vez estimular la inversión-, no ha superado los filtros jurídicos y medioambientales.
El departamento de Ordenación Territorial achaca a la dificultad y «lo eléctrico» de dichas áreas el retraso en la tramitación de la norma y prefiere optar por «la seguridad jurídica» para ordenar estas zonas turísticas, a través de la modificación del Plan Territorial Insular (PTI).
La consellera de Ordenación Territorial, Marta Vidal, incidió ayer en que la inminente aprobación de la norma cautelar generará un «movimiento» e impulso para la economía de la Isla pero con un modelo basado «en reconvertir y no en nuevas edificaciones». Sobre las ART, Vidal insistió en que es necesario «un criterio uniforme» y añadió que «tampoco puede eludirse el pago de sentencias por medio de conferir a los propietarios aprovechamientos urbanísticos».
Sentencias que se derivan de «situaciones ruinosas», en opinión de la consellera, generadas para los propietarios y la administración por una previsión inadecuada del PTI para las áreas de reconversión territorial. Son casos como los de Cesgarden y Princesa Son Bou en Alaior, con indemnizaciones que ascienden a 29 y 5 millones de euros respectivamente, y el de Son Orfila, en Sant Lluís, con reclamación de 9 millones.