Un camión averiado provocó ayer el colapso de la carretera general en el tramo que une los municipios de Ciutadella y Ferreries, el único de la Me-1 que carece de vías alternativas.
Cientos de vehículos quedaron atrapados en una caravana que llegó a alcanzar los cinco kilómetros que separan la cantera de Son Sintes y el desvió de Ets Alocs, después de que, alrededor de las once, un trailer que viajaba en dirección Maó sufriese una avería mecánica y quedase parado en medio de la calzada.
Agentes de la Guardia Civil de Tráfico acudieron al lugar de los hechos para dar paso alterno a la gran cantidad de vehículos que a esa hora, en día festivo nublado y en pleno mes de agosto, circulaban en ambas direcciones. Entre ellos, viajeros que, en plena operación salida, se dirigían a tomar barcos y aviones de regreso a casa por una carretera que en su tramo más occidental no ofrece opciones alternativas.
Hasta el lugar del incidente se desplazó un servicio mecánico para intentar resolver sin éxito la avería. Finalmente se tuvo que recurrir a una grúa que hizo aparición a las 15.30 horas para llevarse el vehículo averiado. Desde ese momento, la principal vía menorquina fue recuperando paulatinamente la normalidad.