La 'Operación Pomada', la irrupción de la Fiscalía Anticorrupción en Menorca para investigar los presuntos amaños urbanísticoas del 'caso Nerer' se cierra, de momento, con tres empresarios imputados. Se trata de Fernando Orfila Marquès y los hermanos Antoni y Francesc Cavaller Gener, socios de las empresas locales presuntamente implicadas en la trama denunciada en el año 2008 ante la Fiscalía (sobre todo, Gel-Fux y Fetosi Desarrollos) por los entonces portavoces del PSOE, PSM y UPCM en el Ayuntamiento de Ciutadella.
El fiscal Pedro Horrach les vincula a sendos delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos que, con la participación de miembros del entonces equipo de gobierno del PP, habrían defraudado a las arcas municipales en torno a 2 millones de euros.
Entre ellas, se incluyan diferentes operaciones urbanísticas, como la compra de Can Saura Morell por parte de la sociedad Nerer y su permuta por el solar de 'la joya de la corona', u otra parcela en Dalt Sa Quintana vendida por Gel-Fux por 1 millón de euros más de lo que se pagó ocho meses antes.