«¡Qué calor!». Es, sin duda, la frase más repetida de las últimas tres semanas en cualquier conversación. La sensación generalizada es que nunca antes las temperaturas habían sido tan elevadas como este julio. Y así lo constatan, en parte, las estadísticas de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Al menos cuando se refiere al calor que hace durante el día.
Y es que la media de las temperaturas máximas (que se registran en horario diurno) en los 20 primeros días de julio en Menorca se sitúa en los 32,1 grados centígrados, lo que representa 3,5 grados más de lo habitual por estas fechas, según los datos aportados por la delegada de la AEMET en Balears, María José Guerrero.
Se trata de un récord histórico. Nunca antes, desde que se tienen registros (desde 1971) Menorca había registrado en julio unas temperaturas diurnas tan elevadas. El julio que más se acerca a este registro fue en 2006, con una media de 31,8 grados.
Eso en el caso de las máximas, no obstante, si se aprecia la temperatura media (entre máximas y mínimas), ésta se sitúa en los 27 grados, 2,5 grados más de lo normal en julio. En este caso sería el segundo registro histórico más alto, solo superado en 2003, cuando la media fue de 27,3 grados. Ello se debe a que las noches no son tan bochornosas como otros años, y especialmente el de 2003, cuando la media de las temperaturas mínimas fue de 23,4 grados, por los 21,9 grados de este julio.
Sea como sea «es un mes de julio muy cálido, con temperaturas anormalmente altas, que no bajan de los 20 grados», explica Guerrero, que matiza que en Balears (a diferencia de la Península) solo ha habido una ola de calor (entre el 4 y el 7 de julio), aunque no significa que por ello haga menos calor en las Islas.
«Lo que ha pasado en Balears es que desde el 26 de junio se ha instalado sobre el Mediterráneo una masa de aire cálido muy estable, que no se ha movido y por eso esta sucesión de días con temperaturas muy altas», subraya.
... Aire acondicionado en casa, el el coche y en el curro. Tanto chute no debe ser bueno para la salud... En fin, yo no me quejo, pues como todos los años disfruto viendo tanta fémina mona ligerísimas de ropa paseando por todos lados. El verano es el tiempo de la carne. Disfrutémoslo.