Podemos no va a dar un voto de confianza a Francisco Fernández Terrés. Pedirá al PSIB-PSOE que el Govern lo cese de su cargo. Así lo decidió este lunes por amplia mayoría (y sin votos en contra) el Consejo Ciudadano Autonómico (la dirección regional) de Podemos, reunidos en Palma, tras las dudas suscitadas por el pasado del histórico dirigente socialista menorquín, relacionado en diversos escándalos, como los casos «Estribor» y «Villarrubí», cuando era teniente de alcalde de Urbanismo del Ayuntamiento de Maó.
La diputada menorquina Montserrat Seijas explicó, en un receso del encuentro del lunes por la tarde, que lo que se ha acordado es pedir al PSOE que, para el cargo de gerente del Servei d'Informació Territorial (Sitibsa), «busque a una persona que no genere tanta desconfianza y no tenga un pasado tan turbio».
La patata caliente, ahora, está sobre el gobierno del PSIB y Més, y la duda estriba en si se aceptará el veto de Podemos. Y Seijas avisa: «Damos un margen al PSOE para que reaccione», pero en caso de no hacerlo, «no nos vamos a quedar con los brazos cruzados». Pedirán el cese, a través de una interpelación en el Parlament. Ello pondría al PSIB entre las cuerdas, ya que posiblemente se quedaría sin mayoría para defender el nombramiento.
La decisión de Podemos se toma diez días después de que Fernández Terrés fuera nombrado gerente del Sitibsa. Desde el primer momento surgieron dudas en Podemos sobre si el veterano socialista menorquín era el más indicado para el cargo, ya que entendían que representaba «la vieja forma de hacer política». Ello provocó incluso la convocatoria de una reunión de urgencia entre ambos partidos para desatascar la situacion.
El encuentro tuvo lugar el sábado en Ciutadella y en ella acudieron, por parte del PSOE las parlamentarias menorquina María José Camps y Elena Baquero y el propio Francisco Fernández Terrés. De Podemos participaron la secretaria general del partido en Menorca, Mae de la Concha y los dos diputados menorquines, Montserrat Seijas y David Martínez.
En la reunión se escucharon las explicaciones de Terrés sobre su pasado, destacando que nunca hizo «nada ilegal» y que no sacó beneficio de su etapa de concejal. El objetivo de los socialistas era convencer a Podemos de la idoneidad de Fernández Terrés para el cargo y que no tenía ninguna relación con los casos mencionados. A tenor del resultado final parece ser que no lograron convencerles.
Y es que tras las explicaciones del PSOE, el domingo se reunió en Maó el Consejo Ciudadano Insular de Podemos que decidió pedir el cese de Terrés, al entender que «este nombramiento no representa la idea de cambio» que quiere transmitir Podemos, asegura la secretaria general, Mae de la Concha.
A por todas, la lucha de las sillas no tiene fin, es muy nauseabundo ver la "merienda de negros" un día si y el otro también