Con cara y ojos redondos, con orejas cortas, con aspecto rechoncho y fino pelo, los gatos criados por Jesús Cebrián tienen una apariencia lo más alejada a lo que vendría a ser el prototipo de gato. «La gente me dice que se parecen más a un búho o a un peluche», afirma el criador. Su aspecto despierta simpatía y ternura a quien los descubre por primera vez.
«Son gatos muy tranquilos, muy caseros y muy dependientes de su dueño», explica. En su casa son los mimados de la familia y reciben todos los mimos y cuidados. Y es que no son gatos cualquiera. Jesús Cebrián ha creado esta «nueva» raza, que afirma es única en el mundo, y que ha bautizado como Perfold, como resultado de cruzar a gatos persas y exóticos.
Objetivo color point
Jesús Cebrián empezó la aventura de criar gatos persas en 1993. Maitre de profesión, nacido en Madrid en 1970, llegó a la Isla hace 14 años, dónde han nacido dos de sus tres hijos. «Siento pasión por los gatos desde que tengo uso de razón. Ya de pequeño, mientras jugaba en los parques, me fijaba en las diferencias de colores de los gatos de diferentes barrios», comenta.
Tras conocer la raza persa en el año 2002, introdujo en su casa a los primeros gatos exóticos, es decir, los persas de pelo corto. Luego vinieron los scottish fold, de orejas pequeñas y dobladas.
Tras nueve años de cruce de estas razas, Jesús Cebrían ha conseguido fijar la raza de sus gatos Perfold. «Nuestro objetivo es enfocar la cría de nuestros gatos exclusivamente a los persas himalayos y exóticos color point», señala. El prototipo de raza que persigue es conseguir gatos con ojos azules, cuerpo blanco y extremidades (orejas y cola) de color, con pelo corto.
«Nuestros gatos Perfold son únicos en el mundo. Se trata de una raza registrada y en proceso de reconocimiento», apunta. Para que sea reconocida debe conseguir 15 ejemplares homogéneos, con el árbol genealógico de 4 generaciones, presentarlos ante una asociación felina internacional y ser evaluados por jueces internacionales que reconozcan a los Perfold como nueva raza nacida en Menorca.
Para ello, Jesús Cebrián, cuenta con una red de familiares, allegados y amigos que adoptan las diferentes camadas, lo que le permite tener disponibles machos y hembras para cruzar. «Mi objetivo no es comercial, es una afición, y los gatitos no se venden. Me han llamado de diferentes países para adquirirlos, pero si los vendiera los perdería. Es importante tener los gatos cerca para hacer los cruces», dice.
En su casa tiene 3 hembras adultas Pelford, una hembra Foldex, un macho persa y otro exótico, además de los gatitos que se queda. Jesús Cebrián y su familia hacen visible su afición y comparten sus gatitos con el resto del mundo a través de la web Fantasycats.com.