Los «puntos verdes» o de recogida selectiva de residuos repartidos por Menorca han duplicado en los últimos tres años el volumen de materiales que en estos se deposita, al pasar de 6.000 a unas 12.000 toneladas, ha indicado este martes el consorcio encargado de su gestión.
Desde que en 2011 empezaron a funcionar, el número de usuarios ha aumentado hasta 2.068 de media que mensualmente emplean el servicio.
Según el Consorcio de Residuos y Energía de Menorca, que gestiona estas instalaciones, los datos de evolución del número de usuarios y las toneladas de materiales tratados consolidan la Xarxa de Deixalleries en la isla como «una buena solución a los residuos no recogidos en contenedores».
En noviembre del 2011 el consorcio -formado por el Consell de Menorca y ocho ayuntamientos de la isla- adjudicó el contrato de servicio público de gestión de la red de puntos verdes a Triatges Menorca SL por un periodo de tres años, que fue prorrogado después hasta diciembre de 2016.
La red está integrada por siete instalaciones distribuidas en los municipios de Menorca, de manera que solo el de Es Castell no cuenta con este servicio.
Su objetivo consiste en complementar los servicios de recogida de residuos.
Las «deixalleries» (puntos verdes» son centros de recepción y almacenamiento separado de residuos domésticos que no son recogidos de manera domiciliaria.