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PP, C's y UPCM recogen firmas para que el Himno suene por Sant Antoni

Se suman a la campaña iniciada por Som Menorca Somos España

Representantes políticos conversan antes de iniciar el acto | Josep Bagur Gomila

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Partido Popular, Ciudadanos y Unió des poble de Ciutadella de Menorca (UPCM) comenzarán una recogida de firmas para que se recupere el Himno nacional durante la procesión de Els Tres Tocs de Sant Antoni. De este modo, se suman a la campaña iniciada hace poco más de una semana por la entidad Som Menorca Somos España, que ha conseguido 422 rúbricas digitales a través del portal Change.org. Xim Todo, representante de la plataforma cívica, aseguró que se llevará a cabo un acto de protesta si, finalmente, el 17 de enero el Himno nacional no suena. Considera este hecho «una falta de respeto, porque mucha gente está a favor y es una tradición que se debe mantener».

Los populares, por su parte, declararon que es «es una tradición de Ciutadella que la izquierda se cree con derecho a manipular».

Desde UPCM, Joan Triay manifestó que el Himno «no es de izquierdas ni de derechas, es de todos y es un símbolo de unión que debe preservarse». Por último, Joan Canals, de Ciuadadanos, afirmó que «la mayoría de gente quiere que suene el himno, por lo que lucharemos para que siga escuchándose durante la procesión de Els Tres Tocs de Sant Antoni».


Ataque al PSOE

Todos los presentes atizaron a los socialistas, a quien acusan de ser incongruente, después abstenerse en el pleno a la moción de UPCM sobre esta cuestión.

Piden que el PSOE insular dé explicaciones sobre la decisión del grupo municipal. Entienden que los socialistas de Ciutadella actuan sin criterio. El PP exigió que los socialistas «reflexionaran» sobre el espacio político que ocupan, «cada vez más radicalizado» y se preguntó ¿dónde está la E de PSOE?. UPCM aseguró que «no comprenden su actiud». Ciudadanos, por su parte, puso como ejemplo la devoción que despierta La Marsellesa entre los franceses, mientras que Todo manifestó que «sería triste tener que llegar a extremos como los de París para reivindicar la identidad nacional».

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