El Ayuntamiento de Ciutadella ha recibido a lo largo de este año 51 avisos de coches abandonados. La cifra se ha incrementado notablemente en los últimos tres meses, coincidiendo con el fin de la temporada estival, periodo en el que se han realizado 20 denuncias.
Para el concejal de Seguridad Ciudadana y Multas, Oriol Baradad, este aumento viene generado por el «efecto llamada», es decir, un vehículo abandonado atrae a otros vehículos. Este hecho ha provocado que el Polígono concentre el 25 por ciento de los automóviles que se encuentran en esta situación. En total, en las calles de la zona industrial se han detectado trece abandonos, de los cuales ocho se han dado a conocer en el último trimestre.
A día de hoy se han retirado tres coches del Polígono, que se encontraban situados en la calle Fusters. En esta vía todavía hay un vehículo abandonado. El resto, se ubican en la calle Mariners i Pescadors, donde hay cinco coches, y en las calles Bijuters y dels Industrials, con dos vehículos y uno, respectivamente.
En el resto del municipio hay contabilizados 20 coches en estado de abandono, tanto en el núcleo urbano como en las urbanizaciones. El de depósito municipal constan 18 automóviles.
Paralelamente a la retirada de los vehículos, se han iniciado los trámites administrativos pertinentes para actuar sobre los diez restantes. El proceso legal hasta conseguir el permiso para poder hacer efectiva la retirada de un vehículo de la vía pública es largo y puede llevar de dos a ocho meses. Una vez se recibe el aviso de abandono y la Policía lo verifica, debe esperarse un mes. Pasados los treinta días, la Policía hace un informe y el Ayuntamiento notifica al propietario la situación de abandono. En caso de no obtener respuesta o no encontrar al propietario, se debe notificar el aviso en el BOE. Si persiste la ausencia de respuesta, se hace una segunda notificación al propietario y en el BOE, en caso que sea necesario. Pasado este tiempo puede retirarse.
El concejal Oriol Baradad explica que una vez el vehículo se declara abandonado puede enviarse al depósito municipal, al centro de descontaminación de vehículos de Son Salomó en caso de que su estado represente un riesgo o esté muy deteriorado o, si el vehículo está en buenas condiciones, pasa a ser propiedad de la administración local.
De hecho, en la actualidad, la Policía Local de Ciutadella tiene a su disposición dos coches que se encontraban abandonados. Baradad expone que «ante la falta de medios económicos para adquirir vehículos, esta posibilidad nos permite hacer uso de ellos». El Consistorio tan solo tiene que afrontar la inversión mínima de pintarlos, instalar las sirenas y el equipamiento necesario. El concejal avanza que ahora hay un par de coches más que podrían acabar formando parte de la flota de vehículos municipal, que están en proceso de revisión y evaluación de su estado.