El Consell de Govern aprobará el viernes el proyecto de ley del Impuesto de Turismo Sostenible, popularmente conocido como ecotasa, introduciendo en su texto como principales alegaciones la reducción en un mes la temporada alta, la exención del pago a menores y el destino de la inversión finalista al medio rural.
El nuevo impuesto será un tributo directo y propio con carácter finalista. Gravará las estancias en alojamientos turísticos, en viviendas que se comercializan turísticamente y en embarcaciones de crucero.
Desde que se puso a exposición pública el borrador del impuesto, se presentaron en la Conselleria de Turismo alegaciones de 42 entidades, entre ellas consells, ayuntamientos, asociaciones empresariales y de sectores afectados.
Los cambios
El Ejecutivo autonómico, tras revisar todas las alegaciones presentadas, ha optado por realizar tres cambios importantes en el texto definitivo.
El primero de ellos amplía la edad mínima de 14 a 16 años para quedar exento del pago del impuesto, con el objetivo de perjudicar lo menos posible al turismo familiar europeo, que en los últimos años había tenido un crecimiento espectacular por los desvíos de turistas del norte de África a causa de la primavera árabe, en un principio, y luego por los atentados terroristas yihadistas.
El segundo cambio sustancial afecta al inicio de la temporada alta, que pasa del 1 de abril al 1 de mayo, por lo que en la Semana Santa siempre se aplicará el cobro de la ecotasa de temporada baja, que es un 50% más barata que la de temporada alta.
La otra importante modificación va relacionada con el destino finalista de la recaudación al medio rural. Si en el borrador original se indicaba que con la recaudación se quería recuperar, proteger, conservar y mantener el medio ambiente, en la modificación introducida que se aprobará el viernes se añade que también habrá financiación para la modernización productiva agro-forestal.