El Ayuntamiento de Sant Lluís afronta la primera gran polémica de su mandato. El cierre al tráfico de la calle Es Cós desde el viernes y hasta el domingo no se ha quedado en una simple prontitud del colectivo de comerciantes. Las ampollas están levantadas. Mientras tanto, el Consistorio no cesa en su empeño por dinamizar el núcleo y hacerlo atractivo desde la pacificación del tráfico. Pero está abierto a aplicar ideas que lleven al éxito de la iniciativa.
La alcaldesa, Montserrat Morlà, no comparte la idea de que sin coches no habrá clientes en los comercios. Advierte de que el municipio dispone de varias bolsas de aparcamientos «infrautilizadas» y ubicadas a dos minutos del centro. No obstante, el reclamado aparcamiento en la entrada del municipio, delante del Lloc d'en Caules, está sobre la mesa. Se desarrollará cuando el Consell apruebe las Normas Subsidiarias del municipio.
Morlà asegura que cabe adaptarse a la normativa actual, avanzar en movilidad sostenible y dar pasos en firme hacia un centro más amable donde los peatones tengan su espacio. Pide «paciencia» y «confianza» en este plan piloto puesto que «si transmitimos malestar a los clientes ya predisponemos a que el proyecto no funcione». Morlà es clara al advertir de que no va a esquivar la polémica sino que la va a afrontar de cara «buscando vías que ayuden a dinamizar el centro». Y así lo hizo en la asamblea de la Asociación de Comerciantes celebrada el martes y en la que recibió «una lluvia de reproches».
Tras explicarse, la alcaldesa apunta a un cierto «entendimiento» con el colectivo con aportaciones que se estudiarán para lograr dinamizar el pueblo. Plantean la creación de aparcamientos disuasorios, al estilo de Maó, y no descartan la colocación de cartelería informativa en estos puntos de estacionamiento, así como otras iniciativas atractivas que ayuden a convertir la zona en una especie de centro comercial abierto.
El portavoz del PP, Cristóbal Coll, dice que la alcaldesa faltó a la verdad al aseverar que «la medida estaba incluida en el plan de movilidad impulsado por el PP». Explica que era una de las opciones pero «tras reunirnos con el colectivo fue descartada».