La norma cautelar que suspende la implantación de grandes equipamientos comerciales en Menorca elimina, en su texto definitivo, la posibilidad de retroactividad, recogiendo así algunas de las alegaciones presentadas y con el fin de otorgar «mayor seguridad jurídica» al nuevo ordenamiento, según anunció ayer el Consell.
La comisión técnica y asesora de Urbanismo y Ordenación del Territorio aprobó este martes de forma definitiva la norma, un paso previo a su aprobación por el pleno el próximo día 18.
La normativa insular entiende como gran superficie aquella que supere los 400 metros cuadrados; no obstante, hay una serie de equipamientos que hasta los 1.500 metros cuadrados no se consideran grandes superficies, como por ejemplo los que distribuyen materiales de construcción o los de automóviles.
A partir de la aprobación en pleno de la norma el Consell afirma que comienza un proceso para consensuar el plan director sectorial de equipamientos comerciales de Menorca, un diálogo que el gobierno insular quiere mantener con el pequeño comercio pero también con el grande, así como con los sindicatos, asociaciones de consumidores, ecologistas, entidades ciudadanas, partidos políticos y municipios. Estos últimos de manera especial, ya que serán los que deberán aplicar el plan.
La norma implica la suspensión de licencias para grandes superficies durante tres años y recibió seis alegaciones, entre ellas las de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged). La vicepresidenta Susana Mora afirmó en el momento de anunciar la norma que se quiere regular, no prohibir, y que no hay ningún gran proyecto que se vea afectado en Menorca.