Red Eléctrica Española ha respondido esta semana con largas a las reclamaciones que presentaron tres afectados por los perjuicios ocasionados a consecuencia del vertido de hidrocarburo que obligó a cerrar durante varios días las playas de Cala en Bosc, Son Xoriguer y Sa Caleta en plena temporada turística.
La empresa propietaria del cable eléctrico submarino, que quedó seccionado por una agresión externa, argumenta que la investigación todavía está en marcha y que cuando disponga de más información sobre las circunstancias del siniestro o de los datos de identificación de la embarcación responsable del incidente, se las harán llegar «para que puedan adoptar las medidas que a su derecho convengan», asegura en una carta.
Los tres afectados reclaman, a través del Ayuntamiento de Ciutadella, cerca de 18.000 euros en concepto de daños y perjuicios como consecuencia del vertido causado por un cable de Red Eléctrica de España.
Los reclamantes pueden hacer alegaciones y pedir la intervención del Govern, que tiene competencias en materia de consumo y podría hacerse cargo del expediente aplicando el mismo procedimiento, señalan fuentes del Ayuntamiento de Ciutadella.
El consistorio añadirá ahora los costes derivados del segundo vertido y lo remitirá al Govern.