El Consell no ha emitido el informe jurídico pendiente sobre el tramo del Camí d'en Kane de Binimoti seis meses después de que acreditara que es público y que el pleno del Ayuntamiento de Ferreries aprobara inventariarlo como bien municipal. Esta lentitud administrativa ha agotado la paciencia de los Amics del Camí d'en Kane, que se personarán en el próximo pleno insular para reclamar que se den prisa en elaborar este documento, algo que tiene bloqueado el proceso. El gobierno municipal lo necesita para responder a las ocho alegaciones presentadas por la propiedad de Binimoti, que defiende que el tramo es privado.
El miembro dels Amics, Francesc Pallicer, explica que su protesta en el pleno será silenciona, «simplemente para que vean que estamos presentes y que no estamos parados», una forma más de presionar para que se acelere. Está convencido de que tarde o temprano se les dará la razón, «lo tenemos cada vez más claro», algo que no quita que dejen de lado las movilizaciones. Calcula que en el próximo pleno del Consell reunirán a entre 10 y 20 simpatizantes y avisa que tienen en mente otra caminata reivindicativa si no se emite el informe en las próximas semanas.
El alcalde de Ferreries, Josep Carreres, confía en que lo harán pronto, porque el gobierno insular estaba pendiente de la Normas Territorial Transitoria, que contemplan que los caminos rurales entran en la red viaria pública. Este punto «es una fuerza más de cara a poder contestar a las alegaciones» de Binimoti, celebra, y calcula que dentro del mes de abril el Ayuntamiento podría negar los argumentos que expone Binimoti y obligarles a abrir el paso por los 1,4 kilómetros de tramo y que está cerrado desde hace más de 10 años.
Carreres entiende la postura de los Amics, pero también «que la administración pública es lenta y que estos son los pasos», de la misma forma que cabe la posibilidad de que el proceso se prolongue más si Binimoti sigue en sus trece.