La gestora insular del PSOE sigue con los trámites para expulsar a Pere Moll como secretario general del partido en Es Migjorn Gran y como alcalde. La presidenta de la gestora Maria José Camps reafirmó su postura, después de reunirse con la comisión y decidieron, «delante de los hechos que todos conocemos, y que los concejales explicaron» que abren un expediente sancionador a Moll, el primer paso para expulsarlo del PSOEy de la alcaldía. Niega cualquier posibilidad de negociar otra salida del conflicto interno, debido a la pérdida de confianza ya manifestada por el resto equipo de gobierno de Es Migjorn.
Los hechos consumados de Moll «traspasan un límite de dignidad y honestidad que debe tener un cargo público y por tanto continuaremos» con su cese, declaró.
Camps recordó que Moll afirmó en su momento que gobernaría por decreto por lo que ya no contempla el diálogo, que dice, era la opción de la gestora «desde el minuto cero». Lamenta, asimismo, que Moll mantenga la negativa a dimitir porque «solo va a alargar el proceso». Esto supondrá que el equipo de gobierno tenga que convivir con esta situación durante un mes y medio.
La gestora asegura que los concejales mantienen su compromiso con la ciudadanía y ejecutan aquellos proyectos y reuniones necesarias. Aunque «la situación es incómoda, estoy segura que para Moll también, se seguirá trabajando». «No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras dure el procedimiento», insiste.
Camps se reunió con las concejalas Ana Britt Sánchez y Mar Ameller después de recibir la contestación formal de Moll, de la misma forma que mantiene conversaciones con los concejales «cuando ellos lo necesitan».
Una vez la comisión gestora insular presente el expediente sancionador a Moll, éste tiene un plazo para presentar alegaciones y después tiene que ser avalado por la gestora federal, antes de que lo puedan expulsar del grupo municipal y registrar la moción de censura para votar, en el pleno, su expulsión del Consistorio.
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