El Ayuntamiento de Alaior dirigió ayer un oficio al conseller balear de Ordenación del Territorio para que el Ejecutivo autonómico se implique en una solución de desbloqueo del Plan General de 2009, suspendido por resolución judicial. El municipio, que considera disparatada la situación urbanística creada, ha trabajado en el estudio de alternativas posibles para evitar que los ciudadanos tengan que ceñirse a la anterior ordenación, «obsoleta y desfasada» que remonta a las previsiones de 1994.
De ese estudio de opciones, el Ayuntamiento ha hallado jurisprudencia para llegar a una solución y alude a la fórmula adoptada por el parlamento gallego con la linclusión en la Ley del Suelo de un capítulo dedicado al «planeamiento provisional», circunstancia que permitiría recuperar el planeamiento anulado, si se efectúa la correción de los defectos constatados. La otra vía es la Ley de Urbanismo, que ayer mismo cerraba el plazo de exposición pública, a la que Alaior ha presentado una alegación en la misma línea.
Ello no implica eludir el cumplimiento de la sentencia, «se tiene que aceptar, pero sin crear una situación complicada por error burocrático ni jugar con todo el sector socioeconómico de un municipio», argumenta el teniente de alcalde Emilio Agis.
Si nos ceñimos a la noticia, en vez de criticar tanto, sería una buena solución.