Las discotecas del puerto de Ciutadella podrán aumentar su horario de cierre durante media hora este viernes de Sant Joan. Así, los responsables se verán obligados a bajar la persiana a las seis de la mañana, treinta minutos antes que los establecimientos de otras zonas, para cumplir con el plan de autoprotección de Es Pla impulsado desde el ayuntamiento. El sábado se han programado los Jocs de la mañana y los responsables de los mismos defienden la necesidad de tener un mayor margen temporal para cumplir con el dispositivo de seguridad preparado.
Sin embargo, el agravio comparativo no ha caído bien entre los titulares de los locales de ocio nocturno de la zona del puerto. Tampoco les ha gustado que el sábado —último día grande de fiesta— solo se les haya dado una hora de plazo extra —esta vez sí es el mismo que al resto— cuando en jornadas festivas como Nochevieja se les conceden hasta dos horas más.
Así, Luis Tascón (Sakova) expuso ayer que «aunque cerremos a las seis un día y a las seis y media el otro la gente no abandonará la zona del puerto enseguida. Seguramente serán las dos jornadas del año de mayor afluencia y creo que se podría haber buscado alguna fórmula alternativa o haber tenido más manga ancha. Espero que no ocurra nada que tengamos que lamentar luego y que las cosas discurran sin problemas añadidos».
La lectura de Pedro Suárez (Kopas) es más dura: «Creo que el agravio comparativo con las otras zonas del municipio que sufriremos el viernes es un poco injusto. Lo malo es que tampoco te puedes acercar al ayuntamiento a tratar esos temas, ya que es como hablar con una pared. Cumpliremos con la ordenanza, nos tenemos que adaptar al escenario que estamos viviendo en la actualidad. Es lo que hay».
Tasco y Suárez son dos de las voces que lamentan las restricciones, a las que también hay que sumar la de los gerentes de otros locales que prefieren mantener el anonimato. Las discotecas del puerto de Ciutadella crearon una entidad común hace unos años, pero la agrupación no está operativa en la actualidad: «Cada uno va por libre y así es más dificl lograr que te tomen en cuenta o te hagan caso», lamentó a este periódico uno de los afectados.
Velar por la seguridad
Consultada por la cuestión, la alcaldesa de Ciutadella, Joana Gomila, explicó ayer que «tenemos que velar por la seguridad de todos en todo momento y lo único que estamos haciendo desde el ayuntamiento es aplicar el plan de autoprotección. Hay que casar la necesidad de ocio nocturno con las fiestas y creo que es lo que se ha hecho esta vez».
Ciutadella esta hasta las narices del colectivo de baretos.