Las constantes peticiones de amarre en el puerto de Maó para embarcaciones de recreo, aquellas que cuentan con una eslora inferior a los ocho metros, no impiden que Autoridad Portuaria de Balears continúe reduciendo el volumen de la lista de espera. Lo hace mediante la concesión de puntos de atraque cuando hay una vacante y, sobre todo, con la eliminación de aquellas solicitudes que no cumplen con los requisitos establecidos por la normativa.
La última lista, publicada por Autoridad Portuaria esta semana, cuenta con 145 embarcaciones en espera, que son seis menos que a finales de marzo a pesar de que desde entonces se han presentado unas veinte nuevas peticiones. En lo que llevamos de año, 38 propietarios han pedido un amarre para su barco de recreo en el puerto de Maó, una cifra ostensiblemente superior a las 24 que aparecen en la lista de espera como registradas en los siete primeros meses del año pasado.
La lista de espera se ha reducido de una forma muy considerable respecto a julio de 2016, cuando había 224 personas registradas. Entonces había veinte peticiones con más de cinco años de antigüedad, cuando ahora solo son cuatro. La más remota se formalizó en marzo de 2008.