Meliá Hotels International ha acusado al Ayuntamiento de Alaior de difundir informaciones sobre irregularidades urbanísticas en su complejo Milanos-Pingüinos con el propósito de dañar la imagen de la compañía, lo que bloquea al proyecto de modernización del alojamiento, situado en la urbanización de Son Bou.
Avisa que que emprenderá «desde ahora mismo» acciones legales para defender sus intereses, ya que «determinadas actuaciones impulsadas por el Ayuntamiento están orientadas a minar la imagen y credibilidad de la empresa y configuradas para dar cobertura a unas decisiones que se aventuran contrarias a las que realmente corresponderían en aplicación de la normativa vigente», advierte.
En un comunicado, el grupo mallorquín ha rechazado tener conocimiento de los informes que según el consistorio habrían sido emitidos por el arquitecto municipal, la secretaria municipal, por la técnica de administración especial y el de un abogado externo, ocasionando a Meliá la consiguiente «inseguridad jurídica».
La empresa mantiene que los hoteles Milanos-Pingüinos no están «fuera de ordenación» y que ningún órgano competente en los 50 años que llevan edificados así lo ha declarado.
Añade que tanto documentos expedidos por el propio Ayuntamiento de Alaior como el Plan General de Ordenación Urbana del año 1994 recogen la edificación sin que conste al respecto observación o consideración de «fuera de ordenación». Entre esos documentos expedidos, figurarían las licencias de reforma, la licencia de actividad y las cédulas urbanísticas emitidas por el consistorio.
Meliá también asegura que ha cumplido con todos los pasos necesarios según la normativa con relación al proyecto de modernización del establecimiento Milanos-Pingüinos y subraya su «desconocimiento» por la causa del trato diferencial que el Ayuntamiento mantiene respecto la solicitud de su grupo con las presentadas por otras entidades o personas.
La compañía hotelera lamenta la «demora injustificada de los trámites» y teme que esta situación se pretenda extender en el tiempo por más de un año sin base legal alguna, coincidiendo con época de elecciones.
Añade que la demora del Ayuntamiento de Alaior contrasta con la agilidad de otros organismos públicos como el Consell de Menorca con la emisión del informe preceptivo y vinculante, e incluso del Consell Consultiu que en su día afeó al consistorio de Alaior su intento de bloqueo del proceso de otorgamiento de licencia mediante un dictamen emitido en diciembre del año pasado.
50 años después de lo que tienen que dar gracias es de seguir en pie semejantes bloques de cemento.