Primero lo anunció el Govern. Y ahora ha sido la nueva ministra de Transición Energética, Teresa Ribera. Han declarado la guerra al diésel. Y sus consecuencias no se han hecho esperar. Es más, han sido inmediatas. Las ventas de los vehículos propulsados por este carburante se han frenado en seco. «No se vende ni un coche diésel», afirma contundente el presidente de la Asociación de Concesionarios del Automóvil de Menorca, Orestes Carreras. Y ya intuye que las empresas que tengan varios vehículos en stock deberán optar por su salida hacia la Península.
La ministra de Transición Energética afirmó que el diésel «tiene los días contados» y se plantea subir los impuestos para equiparar el impuesto que grava el gasóleo con el de la gasolina. El gasóleo es ahora 9,3 céntimos por litro más barato que la gasolina de media. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, matizó que la nueva fiscalidad será progresiva y excluirá a los profesionales del transporte. Este globo sonda se suma al anuncio realizado por la conselleria de Marc Pons que prohibirá la venta de coches diésel en Balears a partir del 2025.
Orestes Carreras indica que en Menorca el coche diésel tiene un uso limitado teniendo en cuenta que al propietario particular no le hace tanta falta como en la Península. No obstante, los profesionales industriales no tienen alternativa. «Acribillan a los coches cuando seguimos funcionando con centrales eléctricas que van con carbón, como la de Alcúdia, y cuya contaminación es muy superior». Agrega que el efecto de estos anuncios es inmediato y quien iba a comprarse un coche diésel lo descarta por el temor de que le incrementen los impuestos y, por tanto, tenga efectos en sus bolsillos. Afirma que los eléctricos no son aún accesibles para todos los ciudadanos y el híbrido conlleva gastos elevados sobre los que «todo el mundo calla».
Igual de enfadado se muestra el presidente de la Asociación de Transportistas de Menorca, Joaquín Bisbal, quien indica que este anuncio tiene las mismas consecuencias que «quemar el campo en verano». Confía en que esta fiscalidad no será la misma para los profesionales puesto que en el caso de serlo «habrá una subida terrible de los precios y por tanto, una inflación», porque el sector trabaja con unos «márgenes ridículos» y «el combustible es uno de los costes más importantes». Ve «un disparate» alborotar al sector con este tipo de anuncios. Y agrega que el vehículo industrial no tiene alternativas. El gas es demasiado caro y el eléctrico es inexistente. Lo que han conseguido es crear otra «incertidumbre» para el sector que ha paralizado inversiones previstas. «Quien iba a comprar vehículos para renovar la flota esperará a ver que ocurre». Ya se han dado casos, indica.
Por otra parte, avisa que están demonizando el diésel cuando la fabricación de este tipo de vehículos ha evolucionado mucho hasta el punto de que un diésel Euro 6 emite ya los mismos gases que un coche de gasolina.
GOB: la solución es energía verde para eléctricos
El responsable de Política Territorial del Grup Balear d'Ornitologia (GOB), Miquel Camps, cree que estos anuncios del Gobierno estatal son avisos para que el sector comience a prever y preparar el futuro. Mientras que en varias ciudades ya se está restringiendo el tráfico de algunos vehículos para reducir la contaminación, en Menorca la alternativa pasa, dice, por el coche eléctrico, pero solo si es repostado a partir de energías limpias. Y es que, tal como afirma, si a un coche eléctrico lo cargamos con energía producida en la central térmica de Maó, «contaminaremos igual o más que ahora porque la central es ineficiente». El coche no emitirá humos, pero la contaminación se habrá producido antes, en la central. «En el nivel en que nos encontramos ya, estos anuncios no son suficientes, hay que aplicar cambios significativos».
Camps indica que el trabajo radica ahora en desencallar el tema de las renovables, paralizado en Madrid que no ha dado autorizaciones para instalaciones significativas de renovables. «Es un problema político, no económico ni tecnológico», apunta.
Asimismo, agrega que el futuro de la movilidad pasa no solo por el mayor uso del transporte público sino también por el uso compartido. Recuerda que en Barcelona, por ejemplo, ya hay un servicio de alquiler de motos eléctricas. En coches, lo veremos próximamente, dice. Ahí está el futuro.
Más de 12.000 turismos se verán afectados por la subida de impuestos
En Menorca hay 77.431 vehículos, en base a los últimos datos registrados por el Institut Balear d'Estadística (Ibestat) relativos a 2017. De este total, 23.009 son propulsados por gasóleo y 53.501 por gasolina. Los autobuses, camiones y furgonetas y tractores industriales son los vehículos que lideran el uso del diésel. En el caso de quedar exentos los transportistas profesionales y autónomos, la medida afectaría expresamente a los 12.325 turismos que utilizan diésel. Hay además 245 autobuses, 9.869 camiones y furgonetas y 153 tractores industriales, entre otros.
Hay que recordar, por otra parte, que Balears es la comunidad autónoma con el precio medio del gasóleo más caro de España. Está en los 1,29 euros el litro, de los que 60,3 céntimos (es decir, el 46,7 por ciento del precio total) son ya impuestos.