Retrasos cada día, alguno de hasta ocho horas, y una media de dos o tres cancelaciones por semana es el balance de una temporada veraniega muy irregular de Vueling en Menorca. Un cúmulo de circunstancias han confluido sobre la compañía con más actividad en rutas domésticas en la Isla para que desde junio apenas haya vivido una jornada sin alteraciones en su programación.
De hecho, en estos dos meses solo ha operado con puntualidad el miércoles y el jueves, los dos días sin vuelos de Ryanair por la huelga de sus pilotos de cabina. Este dato abona la hipótesis sobre el origen de tanta incidencia, que estaría en El Prat, donde Vueling tiene su centro de operaciones y donde es, con diferencia, la compañía que más opera.
Otras informaciones apuntan en el mismo sentido al buscar la causa de los males de Vueling. La plantilla del handling del aeropuerto barcelonés resulta, según fuentes sindicales, muy justa para el nivel de tráfico de esta temporada.