Poco a poco se van desvelando los planes del empresario español de la sanidad privada Víctor Madera para las seis fincas que adquirió en poco más de un año en distintas zonas de Menorca. Primero se conocieron los detalles de la tramitación de un agroturismo en el emblemático lloc de Santa Anna (Ciutadella), después el inicio del proceso para hacer lo propio en Tirant Vell (Es Mercadal) y ahora se ha hecho público el contenido de los anteproyectos para convertir los predios colindantes de Son Ermità y Binidelfà (Ferreries) en sendos agroturismos de 18 y 22 plazas de alojamiento respectivamente.
Para la mayor de las dos fincas, la de Binidelfà, que tiene casi 238 hectáreas de extensión, el proyecto presentado por la sociedad Encantos de Menorca S.A. –que gestiona el patrimonio inmobiliario de Madera en Menorca– prevé realizar obras de mejora en edificaciones existente que suman 1.269 metros cuadrados. La capacidad alojativa se distribuirá entre la casa de payés, con dos dormitorios en la planta baja y otros tres en la primera, y la boyera principal, que cambiará de uso para convertirse en el conjunto principal del agroturismo, con seis habitaciones, un hall y el salón-comedor.
El proyecto también prevé la construcción de una piscina con tratamiento natural de depuración de 100 metros cuadrados y se aprovechará uno de los establos para situar una sala de estar, una cocina y un baño de apoyo a la zona de piscina. El proyecto avanza la intención en un futuro, y previo proceso de legalización, de reformar otras construcciones posteriores a 1956 –no pueden destinarse a la actividad de agroturismo–. Es el caso de la central lechera de esta finca que se dedica a la producción semiextensiva de vaca de leche para su posterior venta. El objetivo es echarla abajo y reconstruirla en otra ubicación con materiales más acordes al aspecto tradicional de la finca, dado que ahora está construida de acero y chapa. La finca cuenta con 22 cabezas de ganado vacuno y está gestionada por Binideufà SRM.
Al norte y al noroeste de Binidelfà se encuentra el otro predio que Madera planea convertir en agroturismo en Ferreries, Son Ermità, con una extensión de 156,67 hectáreas. El anteproyecto, reviste una mayor complejidad ya que las casas principales de la edificación están en el Catálogo de Protección del Patrimonio de Ferreries. Cinco habitaciones se ubicarán en la vivienda, dos en la planta baja y otras tres en la primera, mientras que otros cinco dormitorios está previsto que se habiliten en las boyeras. La finca tendrá dos piscinas naturales.
El objetivo es que la finca, además de mantener su actividad actual, la producción de vaca de raza menorquina en extensivo para la venta de terneros para su posterior engorde, contará con huertos de autoabastecimiento, un pequeño corral de gallinas camperas y producción de queso, además de plantear la posibilidad de criar caballos para realizar excursiones por la zona. Como en el caso de Binidelfà, se avanza la intención de presentar futuros proyectos de legalización y reforma de otras construcciones.