Cinco años después de ser anunciado, el proyecto para transformar en hotel de interior el emblemático edificio conocido como Sa Catòlica, situado en el centro histórico de Ciutadella, ha entrado en su recta final.
El expediente municipal se encuentra, desde este martes, en exposición pública, para que, una vez resueltas las alegaciones -en el caso de que sean presentadas- el Ayuntamiento conceda la licencia para convertirlo en un hotel con 36 plazas, distribuidas en 18 habitaciones dobles. El establecimiento se ubicará en dos inmuebles de la calle Sant Sebastià, correspondientes a los números 5-7 y 9-11, cuya superficie es de 444 metros cuadrados y 301 metros cuadrados, respectivamente.
Estos edificios fueron alquilados a la Diócesis de Menorca por el empresario francés Laurent Morel-Ruymen, que ya gestiona el hotel Can Faustino y es el promotor del hotel rural Llucalari, en Alaior, todavía en tramitación. La reforma para la transformación de Sa Catòlica en hotel urbano es promovida por Sa Michaela Hotel y Casa SL, con un presupuesto de obra de 875.669 euros.
Los 1.216 metros cuadrados de superficie construible se distribuirán en sótano, planta baja, primera planta, segunda planta y tres patios. En la planta baja se ubicarán cuatro de las habitaciones, una de ellas habilitada para personas con minusvalías, además de zonas comunes como cocina o comedor. La primera y la segunda planta albergarán el resto de habitaciones, con diez y cuatro respectivamente. El sótano estará dedicado a sala de reuniones y también uso almacén. Este nuevo hotel urbano en Ciutadella, que recibirá el nombre de Sa Michaela, contará asimismo con una piscina cuya superficie es de treinta metros cuadrados.
Se inspira en una arquitectura tradicional menorquina con muros de marés, bóvedas, vigas de madera y quarts de marès. El acceso a las salas y dependencias interiores contará con elementos de inspiración gótica y puertas en arco de medio punto.