La venta de una propiedad situada en una finca en la calle Na Claró, de Son Blanc, en Ciutadella, ha derivado en la reclamación de Fincas Llonga al propietario vendedor, un ciudadano francés y su esposa, después de que la operación quedara escriturada ante notario el pasado martes. El vendedor no ha abonado a la agencia los 39.930 euros pactados que corresponden a la comisión por la venta fijada en 1,1 millones de euros.
La inmobiliaria ya ha anunciado la interposición de una demanda civil contra su cliente, mientras que el abogado de los vendedores esgrime que estos no se niegan a pagar la comisión sino que se trata de determinar la autoría de la intermediación puesto que otra inmobiliaria considera que fue la que inició la operación.
Fincas Llonga acredita que poseía en exclusividad para su venta el chalé de 527 metros cuadrados, más la piscina de 66 y barbacoa de 84, incluidas en las dos parcelas unidas de 4.500 metros cuadrados después de una agrupación que también gestionó la misma agencia.