La Comisión Europea respondió este lunes a la denuncia presentada por la Asociación de Comerciantes de Son Parc, que había acudido al gobierno europeo en busca de amparo ante el atropello medioambiental que, a su parecer, supone la construcción del emisario submarino para evacuar las aguas de la nueva depuradora de Addaia, que ya ha encarado la fase final de las obras, en una zona sensible que afecta directamente a la playa del Arenal de Son Saura y a Cala Pudent, ambas parte de un Lugar de Importancia Comunitaria (LIC).
El jefe de unidad de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Ion Codescu, advierte de que se procederá «al archivo de la denuncia» en el plazo de cuatro semanas salvo que reciba nuevos elementos de información que inviten a revaluar la reclamación.