A pie, a través de unos itinerarios seguros y que fomenten que los escolares vayan solos al ‘cole' o acompañados de amigos. Estos son tres de los objetivos que pretende lograr el Ayuntamiento de Maó con la puesta en marcha de una red de itinerarios escolares que permitan que los niños que vayan a la escuela recuperen la calle y se la hagan suya.
Esta iniciativa sobre la que los departamentos de Educación y Movilidad del Ayuntamiento llevan año y medio trabajando se irá implementando este curso escolar, posiblemente dentro del primer trimestre.
La propuesta se implantará primero en cuatro centros educativos que serán el CEIP Mare de Déu del Carme, CEIP Maria Lluïsa Serra, CEIP Mateu Fontirroig y CEIP Mare de Déu de Gràcia teniendo en cuenta que son colegios de doble línea, que mayor número de vehículos concentran en las entradas y salidas de clase y que más dificultades de movilidad presentan, además de estar todos ubicados en la periferia de la ciudad. Y es que, entre los objetivos de la iniciativa está la reducción del número de vehículos que transportan a los escolares y promover la movilidad activa, además de fomentar la autonomía de los niños y crear rutas seguras. Si la actividad surte el efecto deseado, se irá ampliando a otros centros. «Es un proyecto vivo», indica la concejala de Educación y Juventud, Laia Obrador.
Las rutas tienen, mayoritariamente, aceras anchas y no son excesivamente largas. No implican cambios a nivel de movilidad rodada.
Obrador explica que para cada centro se han estudiado y analizado entre dos y tres itinerarios alternativos que serán los que se marcarán y señalizarán en unas semanas. Se han organizado comisiones para cada centro con personal municipal, policía, padres, equipo directivo y un joven del programa de Joves Qualificats para definir estos itinerarios.
Informa que cada colegio está organizado en base al mapa escolar y, por tanto, están claras las zonas en donde residen los alumnos de cada uno de los centros.
La próxima tarea que ejecutará el Ayuntamiento será la señalización de estos itinerarios tanto con marcas verticales como con distintivos que se colocarán encima de las aceras para que los niños que vayan a pie a la escuela sepan que van por el camino correcto y seguro. Pero, «¿cómo sé yo que este no me lleva a otra escuela que no es la mía?», se preguntó un niño. Obrador indica que cada ruta llevará un número para que los pequeños sepan cuál es la suya y no se confundan.
El Ayuntamiento de Maó ha diseñado un distintivo, una mascota con la que los alumnos relacionen el itinerario. Será una tortuga surgida de una lluvia de ideas entre los escolares. Avanza poco a poco pero seguro.
Obrador indica que las señales empezarán a instalarse en unos quince días y luego será necesaria la difusión y las actividades de sensibilización para promover su uso.