Las dietas que por alojamiento, manutención y transporte terrestre paga el IB-Salut a los pacientes que se desplazan fuera de su isla para ser atendidos se mantienen congeladas desde 2016, cuando se produjo un modesto incremento respecto a la normativa aprobada en 2011. Esto es así pese a que en los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2019 se habilitó una partida, de 150.000 euros, para afrontar su actualización.
La demanda de una puesta al día de estas dietas, reiterada esta misma semana en la Comisión de Salud del Parlament a iniciativa de la diputada del Partido Popular Asunción Pons, gana fuerza cuando se establece una comparación con las dietas que por los mismos conceptos, o al menos muy parecidos, abona el Servicio Canario de Salud. Son prácticamente el doble.
En el archipiélago canario se llevó a cabo en junio del año pasado una importante actualización de las dietas que se pagan a los pacientes desplazados. Así las cosas, y aún cuando la aplicación de la normativa no es idéntica, en concepto de alojamiento un canario que debe pernoctar por motivos de salud fuera de su isla cuenta con una aportación de 65,97 euros diarios, cuando en Balears la cantidad se mantiene en los 36,90 euros diarios. En cuanto a la manutención, en Canarias la dieta es de 37,40 euros por pensión completa y 14,96 euros por media pensión, cuando en Balears se quedan en 14,35 y 7,17 euros respectivamente.
En cuanto al transporte por tierra, mientras que en Balears existe una cantidad fija de 12,30 euros en Canarias se paga por kilometraje, así como los tíquets de los aparcamientos o los medios utilizados.
La enmienda en los presupuestos de 2019 para aumentar la partida fue impulsada por Més per Menorca. Su diputada Patricia Font resume al respecto que «no hay manera, tenemos que seguir reclamando. Nos dicen que lo están estudiando, que es complicado, pero son excusas».
En la proposición no de ley debatida el martes en el Parlament balear, el PP reclamaba una adecuación de las dietas a los costes reales de los gastos que en principio se pretenden compensar, así como la inclusión de un mecanismo que permita la actualización permanente de las cantidades a abonar a los pacientes y familiares desplazados en función del IPC. «Se obliga a los usuarios a poner de su bolsillo», explicó Asunción Pons en la defensa de unas iniciativas que se aprobaron por unanimidad.