El año 2019 se ha cerrado en Menorca con un cambio de tendencia en el mercado inmobiliario. Tras cinco años de crecimiento constante en la compraventa de viviendas, el balance hecho público por el Institut d'Estadística de Balears (Ibestat) a partir de la información del Registro de la Propiedad, sitúa el número de operaciones en Menorca en 1.682, 150 menos que en 2018, lo que supone un descenso del 8,1 por ciento. La Isla deja así de resistirse a la tendencia balear a la baja.
Durante el lustro de crecimiento en la compraventa de casas se ha registrado un repunte de operaciones del 68,3 por ciento, de las 1.088 de 2014 hasta las 1.832 de 2018. Esa tendencia ha cambiado y lo ha hecho tanto en lo que se refiere a las transacciones de viviendas nuevas, como de las usadas. Las primeras han descendido un 7,6 por ciento y las segundas, un 8,5 por ciento. Del total de 1.682 operaciones firmadas a lo largo del año pasado, el 73,2 por ciento han sido sobre propiedades usadas. Hace seis años, en los momentos más duros de la crisis, las operaciones de casas nuevas superaban a las de viviendas nuevas. cnico que se ha terminado de confirmar durante el pasado año.