La segunda fase del proyecto integral de reforma del puerto de Fornells, en la que se concentra la mayor parte de las actuaciones con un presupuesto de 7,8 millones de euros, recibió ayer el visto bueno unánime de la Comisión Balear de Medio Ambiente, que no obstante ha establecido una serie de condicionantes, algunos de ellos de calado, como el que obliga a Ports de les Illes Balears a prohibir la navegación en la parte más superficial de la barrera-arrecife de posidonia mediante balizas, una medida pionera ya que es la primera vez que el ente portuario de la Comunidad Autónoma tiene que delimitar la navegación en uno de los puertos que gestiona.
Ports deberá asimismo crear canales de acceso a los pantalanes que se instalan en temporada con el objetivo de evitar el impacto de las hélices de las embarcaciones en el arrecife. Asimismo, como medida compensatoria, el ente deberá financiar la instalación de 77 boyas ecológicas creando nuevos campos de boyas tanto en el interior, como en el exterior de la bahía, y se hará cargo del coste de la vigilancia de los fondeos en las zonas marinas protegidas del norte de Menorca y de Punta Redonda Arenal d'en Castell.
Medio Ambiente concluye que el proyecto no produce impactos adversos significativos sobre el medio ambiente y que de hecho supone una mejora respecto a las condiciones actuales del puerto. El proyecto puede seguir ahora la tramitación con la redacción del proyecto de ejecución que incluirá las prescripciones y medidas compensatorias. Ports estima que las obras podrán arrancar en el último trimestre de este año.
El proyecto incluye entre otras actuaciones la mejora de la estructura y condiciones del abrigo del puerto, el soterramiento del depósito de combustible y la unificación de volúmenes existentes ante el varadero en un único edificio al que se trasladarán las oficinas de Ports. Asimismo, también se renovarán pavimentos y redes de servicios tanto portuarias como municipales. También se sustituirá el alcantarillado que actualmente provoca vertidos en el puerto. Para ello será mercenario un convenio con el Ayuntamiento de Es Mercadal.
Lo que mata sa posidònia són ets EMISSARIS!!