Estamos ante la peor estadística laboral desde que se trata este tipo de información. El confinamiento y consiguiente parón de la actividad como medios para contener la pandemia sanitaria arroja sus consecuencias en el mercado laboral. 10.620 trabajadores de la Isla están en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en la segunda quincena de marzo o en abril.
La cifra es superior a las primeras previsiones establecidas al comienzo de la situación que atravesamos y puede crecer hasta los 12.000 por cuanto todavía están pendientes de trámite unos dos mil expedientes en las Islas. El Govern hizo ayer balance, hasta ahora han sido aprobados 17.000 y los trabajadores incluidos en alguno de ellos son 141.614, de los que el 7,5 por ciento corresponden a Menorca, según explica el conseller Iago Negueruela.
La fórmula del ERTE, a la que se han acogido aquellas empresas que se han visto obligadas a cesar en su actividad o se han visto perjudicadas por las restricciones y han tenido que suspender o reducir jornada laboral, permite dar cobertura al 39 por ciento de los afiliados menorquines a la Seguridad Social y al 29,4 en Balears. Esta es la característica más valorada por el conseller de Modelo Productivo, Trabajo y Turismo.