La instalación de la estructura de vidrio que rodeará al esqueleto metalizado del nuevo ascensor que conectará el centro de Maó con el puerto se ha iniciado este lunes.
Según ha informado el Consistorio este lunes, se trata de la última parte de la estructura exterior de esta nueva instalación, que quedará lista este martes y permitirá que las personas usuarias del ascensor «puedan disfrutar de unas vistas panorámicas a la rada».
Asimismo, ha recordado que este nuevo elemento, situado en el entorno de la plaza Rochina y el Mercado del Claustre, supone una inversión de 1,2 millones de euros, de los cuales el Ayuntamiento aportará cerca de 400.000 euros y la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) sufragará 847.906 euros.
Tras unas semanas de inactividad con motivo del estado de alarma decretado a raíz de los efectos de la COVID-19, se han retomado las labores de la última fase de la construcción del ascensor.
«Una vez instalada la estructura de vidrio, ya quedará listo todo el revestimiento exterior», han apuntado igualmente a través de un comunicado.
De este modo, sólo quedará pendiente instalar la maquinaria interna del ascensor, que será el último paso previo a la entrada en funcionamiento de este nuevo servicio, que se prevé que pueda ser una realidad en las próximas semanas.
Sres de G O B, ¿¿ Hay alguien???, No sé os oye para nada,. Faltaría más matar la gallina de los huevos de Oro