El contagio del coronavirus se descontrola en las Islas y la Conselleria de Salid notificó este martes 908 casos positivos y un fallecido más en un solo día. La cifra era tan alarmante que el Govern se vio obligado a aclarar que se trataba de casos acumulados no contabilizados en días previos. Asegura que la media de contagios volverá a situarse en torno a los 200 o 300 casos al día una vez que se recupere el recuento ordinario.
En cualquier caso, la preocupación por la situación de la epidemia ya ha comenzado a extenderse en el Govern y algunos consellers hablan abiertamente de iniciar cuanto antes confinamientos selectivos en las zonas más afectadas por la enfermedad. Es una de las cuestiones que está sobre la mesa para tratar de frenar la expansión de los contagios y los puntos señalados son las zonas de Son Gotleu y Pere Garau, en Palma, S'Arenal de Llucmajor, en torno al centro de salud de Trencadors, y algunas zonas concretas de Inca, no toda la localidad.
La decisión definitiva no está tomada a pesar de que los expertos que asesoran al Govern defienden empezar a tomar medidas duras para intentar recuperar el control del contagio, que ahora mismo está descontrolado. El virus circula libremente, tal como reconoció Javier Arranz, y ahora mismo es imposible seguir el rastreo de los casos.
Consecuencias en educación
La presidenta del Govern vuelve a reunirse esta mañana con los presidentes de los consells, el de la FELIB y el alcalde de Palma para abordar estas nuevas medidas de control de la pandemia, También estará la consellera de Salud, Patricia Gómez; la investigadora Margalida Frontera y el gerente de l'Ibassal, Rubén Castro, pero no se sabe si se atenderá la recomendación de los asesores.
Los expertos también propusieron en su día que todos los viajeros procedentes de Catalunya pasaran una cuarentena, pero la realidad es que el número de casos importados desde esa comunidad apenas ha llegado a 17 desde mayo. Otros 20 procedían de Madrid.
La decisión sobre confinar o no a una parte de la población tiene otras derivadas que pesan en el Govern a la hora de proponer esta medida. Una de ellas tiene que ver con la vuelta a las aulas.
La vuelta a las aulas
Si se confinan barrios enteros, los residentes no podrán acudir a los colegios, por lo que la educación deberá ser telemática, un escenario que ahora mismo no gusta en el Govern. El Ejecutivo opta de forma clara por un inicio de las clases semipresencial a partir de 2º de ESO y presencial con grupos más reducidos en infantil y primaria.
La Abogacía de la Comunitat ya tiene preparada la argumentación jurídica en la hipótesis de que se adopte la línea dura y se elija el confinamiento.