Una de las últimas medidas para la contención del coronavirus es el cierre de playas y parques de las 21 horas a las 7 de la mañana. Una restricción que busca evitar la concentración de grupos de gente por las noches en espacios públicos (también se limitan las reuniones en el ámbito privado) y que en Menorca no está presentando grandes problemas. Desde las policías locales destacan, salvo algunas excepciones, una creciente conciencia social en relación a la pandemia.
Cada día, a las 21 horas, los agentes de las policías locales de la Isla, añaden a su lista de tareas el control de las playas y los parques públicos. Una labor que realizan dentro de sus posibilidades, dado lo cortas que, en general, son las plantillas de estos cuerpos en todos los Ayuntamientos. Mandos de la Policía Local de Ciutadella apuntaban ayer que, básicamente, su misión es la de «informar» a los usuarios de parques y playas, principalmente jóvenes, en relación a la norma que impide el uso de estos espacios por la noche y también del uso obligatorio de mascarillas en la vía pública. Unas medidas que por lo general se cumplen, aunque es cierto que en ocasiones «alegan desconocimiento» de la normativa en el momento de la advertencia.
Al igual que en el municipio de poniente, en Maó, el inspector jefe de la Policía Local, Vicente Vaquero, destacaba también la ausencia de incumplimientos. «Está yendo muy bien, la norma se está cumpliendo, también en las playas de mayor afluencia como Es Grau o Sa Mesquida». Así, «no tenemos incidencias destacadas, la gente está cumpliendo», reiteraba el agente, quien apuntaba que «intentamos distribuir los efectivos que tenemos, del mejor modo en cada momento, y si tenemos algún problema nos coordinamos con la Policía Nacional».