La Junta de Personal Docente no Universitaria de Menorca ha denunciado este lunes la falta de profesores en los centros educativos de la isla y pide a la Conselleria de Educación del Govern balear que rectifique.
En un comunicado este, organismo asegura que se han contratado 21 nuevos docentes en Menorca, una cifra que “no llega, ni de lejos, al incremento de un profesor más por centro”, y califica de “agravio” la situación de la isla en relación con el resto del archipiélago: “Nos perjudica en comparación con las otras islas donde el aumento, a pesar de seguir siendo insuficiente, es significativamente mejor”.
Además, la Junta de Personal señala que las incorporaciones en los centros menorquines de nuevo profesorado no permiten garantizar las ratios de alumnos que exige la normativa de la administración para reducir la propagación de la Covid-19 en las aulas.
“Consideramos que no deberían pasar de 15 alumnos por clase, el refuerzo de la conselleria pone en riesgo la seguridad y no garantiza la presencialidad en todas las etapas educativas, que es lo deseable”, se subraya en el comunicado.
Por otro lado, también se pide que se realicen pruebas serológicas al personal docente y que se dote a los centros educativos de personal sanitario para intervenir ante hipotéticos casos de coronavirus.
¿Falta de profesores? Debe tratarse de una broma. Nunca jamás en toda la historia se han destinado a la Enseñanza ni la centésima parte de los recursos económicos que se despilfarran hoy día en multitud de escuelas, colegios, institutos y universidades por doquier, o en mantener cien veces más profesores y maestros que los que había hace algunas pocas décadas, cuando por cierto la Educación funcionaba mil veces mejor que ahora y con infinitamente muchísimo menos fracaso escolar y con infinitos más conocimientos que en la actualidad, con aulas de 45 alumnos y sin el menor problema de autoridad ni disciplina en el 99% de los casos. Así que ya está bien de tanta milonga de que siempre faltan profesores y falta dinero para la Educación, salvo que tal vez lo que se pretenda sea llegar a conseguir la absurda situación de 6 ó 7 alumnos máximo por aula. Quizá es eso a lo que quieren ir estos sindicatos de agitadores radicales.