Los socios de la Cooperativa San Crispín de Alaior aprobaron el jueves el relevo de Joan Camps Mir al frente de la entidad, una responsabilidad que ha ostentado en los últimos diez años. Le sustituirá en el cargo Belly Ester, que ya formaba parte del Consejo Rector de la entidad, al fente de una junta de continuidad con Josep Maria Teis como vicepresidente. Mirèia Gómez y Judith Morillas se incorporan, por su parte, al Consejo Rector.
Camps destacó en su discurso de despedida que, a pesar de las dificultades para sacar adelante la Cooperativa en un entorno de gran competencia en el sector de la distribución, se ha conseguido mejorar las tiendas y recuperar las ventas.
Los socios también aprobaron las cuentas de 2019, ejercicio en que la Cooperativa registró unas pérdidas de 13.000 euros pese a facturar 4,5 millones. El motivo del desequilibrio fue la subida salarial prevista en el convenio colectivo del comercio. No obstante, se prevé volver a cifras positivas en 2020 por el aumento registrado en las ventas en las tres tiendas de Alaior y Es Migjorn Gran, que se sitúa en el 15 por ciento. El objetivo de este año es superar los 5 millones de facturación.