Si quedaba alguna duda de que la transición energética va en serio, estas cifras pueden ayudar a combatir el escepticismo. En marzo de 2018, hace apenas tres años, el proyecto de ampliación del parque fotovoltaico de Son Salomó era el único de renovables que se estaba tramitando ante la Dirección General de Energía del Govern.
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En estos tres años la cosa ha cambiado. Y mucho. Según confirman desde el Govern, en la actualidad ya son trece –incluyendo la ampliación de Son Salomó– los proyectos firmes de desarrollo de renovables que se encuentran en fase de tramitación.
Los trece proyectos suman la friolera de 177,83 MW (megavatios). Hay que poner en contexto lo que supone esa potencia. En primer lugar comparándola con la potencia renovable que hay actualmente instalada entre los dos parques solares y el parque eólico de Milà, apenas 8 MW. En segundo lugar hay que tener en cuenta cuál es el nivel de demanda en Menorca, con una potencia requerida de alrededor de 70 MW en invierno y un máximo de 130 MW en verano. Se podría concluir que con esa potencia en tramitación sobraría para satisfacer la demanda, aunque hay que tener en cuenta que las energías renovables no son de fácil gestión y que por el momento son necesarias alternativas que den seguridad al suministro.
En tercer lugar vale la pena atender a los objetivos de la Estrategia 2030 de descarbonización. En ese documento se establece que en una década deberían instalarse 261 MW de energía fotovoltaica en plantas de generación sobre suelo. En los albores del año 2021, a diez de la meta, ya están en trámite cerca del 70 por ciento de los megavatios de solar fotovoltaica planificados. Además aquí no se analizan los proyectos de iniciativa pública previstos, como la repotenciación de Milà o el parque socializado de Es Castell.