El Ayuntamiento de Sant Lluís y la promotora Proinbi SL han presentado recurso potestativo de reposición contra la resolución de la Comisión Balear de Medio Ambiente por la que archiva por caducidad del expediente de modificación del plan parcial de Cap d'en Font y Binissafúller Platja, un desarrollo urbanístico que debe permitir la construcción de 115 nuevas viviendas unifamiliares aisladas en la zona. Fuentes del Consistorio explicaban ayer que llevan años trabajando en la tramitación de esa modificación de plan parcial y que su archivo supondría volver a empezar el farragoso proceso.
El pleno del órgano de control medioambiental del Govern celebrado esta semana incluía en su orden del día la dación de cuenta de la resolución de archivo de este proyecto sobre el que reclamó modificaciones en marzo de 2016, remitida a los afectados el pasado mes de marzo, pero finalmente el asunto ha quedado encima de la mesa a la espera de que los servicios jurídicos de la Comisión Balear de Medio Ambiente evalúen si procede aceptar el recurso interpuesto por el Consistorio y la promotora.
Mientras Medio Ambiente defiende que el expediente ha caducado sin que se haya tramitado las modificaciones exigidas, desde el Ayuntamiento de Sant Lluís recuerdan que la junta de Gobierno municipal aprobó inicialmente esa modificación en abril del año 2020, lo que demuestra que no se ha abandonado una tramitación para las que han tenido que pedir informe a multitud de organismos, entre ellos la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
Expectativas del plan
La modificación del plan parcial, que afecta a una zona de 247.836 metros cuadrados (con un espacio público de 27.546 metros cuadrados), debe permitir un incremento de población de 321 plazas de alojamiento en 107 viviendas para uso residencial o turístico en Cap d'en Font y otras 150 plazas en 50 viviendas en Binissafúller, aunque 42 viviendas ya han sido construidas, 23 en Cap d'en Font y 19 en Binissafúller, con una capacidad de alojamiento total de 126 plazas.