La playa de Punta Prima, desde el viernes, y la de Binibèquer, a principios de esta próxima semana, contarán con dos desfibriladores. Los dispositivos estarán instalados en el exterior de los puntos de socorro de las calas, y gracias a su mecanismo de funcionamiento, podrán ser utilizados en cualquier momento, las 24 horas del día, aún cuando sea en un momento en que el servicio de socorrismo no esté activo.
El Ayuntamiento de Sant Lluís decidió incluir la dotación de desfibriladores como opción de mejora de las ofertas de los licitantes para el servicio de socorrismo y vigilancia. Es así que el pliego de condiciones contemplaba la posibilidad de su instalación y de su mantenimiento, con el objetivo de mejorar la calidad y la seguridad para los bañistas.
Prevención
Entre los años 2015 y 2020, en las playas de Balears se produjeron 41 defunciones, en horas en que no estaba operativo el servicio de socorrismo. De ahí que disponer de estos dispositivos en las calas santlluïseres supone un recurso más para prevenir incidencias.
Desde el consistorio recuerdan que los desfibriladores pueden ser utilizados por cualquier persona, ya que una vez se activan, los propios dispositivos ofrecen indicaciones para su uso. Además, al cogerlos emiten un potente sonido, para que las personas que estén en las proximidades puedan apercibirse de que se está llevando a cabo una actuación, para que así puedan contribuir si fuera preciso.
En cuanto a la ubicación elegida para su instalación, en el caso de Punta Prima, es próxima a una zona de gran concurrencia como es el Passeig de s'Arenal. Así, en realidad podrían hacer uso de los desfibriladores personas que lo requirieran y que no necesariamente estuvieran en la playa.