El Govern balear ha acordado este martes, en el marco de la IV Conferencia de Presidentes, inyectar un total de 22 millones los cuatro consells insulares, procedentes de los fondos covid, para paliar la pérdida de ingresos por la pandemia.
Esta cifra se distribuye entre las cuatro islas para evitar la liquidación negativa, que asciende a 2,4 millones de euros, tras la bajada de ingresos durante el ejercicio 2020, ha apuntado la presidenta balear, Francina Armengol en una rueda de prensa.
La IV Conferencia de Presidentes se ha celebrado este martes en la sede del Consell de Eivissa, con la presencia del máximo dirigente de la institución ibicenca, Vicent Marí, la presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, la de Menorca, Susana Mora, y Alejandra Ferrer, de Formentera.
En cuanto a la distribución de esta partida, Mallorca recibirá 13,9 millones, tras presentar una liquidación negativa de 1,7 millones de euros y un impacto de ingresos de 15,6 millones; Menorca ingresará 2,5 millones de euros tras presentar pérdidas por valor de 327.000 euros y un impacto de 2,8 millones, y Formentera sumará 417.500 euros después de restar 45.000 euros de pérdidas a los 462.446 euros de ingresos. Eivissa, por su parte, recibirá un total de 2,8 millones tras justificar unas pérdidas de 311.000 euros y un impacto de ingresos de 3,1 millones.
Asimismo, también se ha acordado compensar las pérdidas en materia de transporte terrestre y se hará, por un lado, a través de los fondos covid y, por otro, a cuenta los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma.
Eivissa recibirá, entre ambas aportaciones, un total de 5.794.000 euros; Menorca, 2.830.000 euros y, por último, Formentera ingresará 700.000 euros.
Durante la reunión de la IV Conferencia de Presidentes también se ha tratado la modificación de la Ley de Consells Insulares con el fin de adaptarla a la «nueva realidad», ha dicho Armengol.
En este sentido, la nueva normativa se prevé que esté aprobada durante el primer trimestre del próximo ejercicio.
Las modificaciones contempladas prevén no solo «agilizar» la tramitación de las entidades insulares para que puedan desarrollar de forma «más clara» las competencias transferidas sino también adecuar el carácter «autonómico e insular» de los consells, reconocido por el Estatuto de Autonomía, pero que en su capacidad de gestión real tienen «más restricciones locales» para gestionar estas transferencias.
Además, la Ley de Consells Insulares del año 2000 no prevé el Consell de Formentera por lo que esta nueva normativa «incluirá una realidad que hace muchos años ya funcionando».
También se ha solicitado al Gobierno de España hacer una modificación en la Ley de Bases Locales para que incluya la figura de los consells insulares como «instituciones que tienen esta doble vertiente local y autonómica».
Actualmente, las administraciones insulares figuran como un «ayuntamiento pequeño» lo que supone, según Armengol, un «agravio comparativo» tanto en financiación como en agilidad administrativa.EFE