Las dependencias de los antiguos cuarteles de Santiago que ha ocupado la brigada municipal de obras de Maó se han vaciado para que este edificio que ya fue cedido al Govern para la construcción de la nueva residencia geriátrica del municipio. El viernes concluyeron estos trabajos. El alcalde, Héctor Pons, y la concejala de Economía, Carme Seguí, realizaron una visita al equipo de la brigada en el momento del traslado.
Los trabajadores de este servicio municipal llevaba unos 20 años ocupando las antiguas dependencias municipales. Su material se ha traslado a distintas ubicaciones, todas ellas provisionales. El Ayuntamiento adquirió la antigua nave de Madesa, en la calle Bajolí del polígono industrial. Se ha licitado el contrato para llevar a cabo las obras de adaptación de este local a su nuevo uso.
El alcalde ha destacado «el esfuerzo que realiza el Ayuntamiento y los trabajadores para resolver las ubicaciones de servicios, necesario para la planificación de la ciudad y dar respuesta a las demandas de los ciudadanos».