El peso del capítulo de personal en los presupuestos del Consell no ha dejado de crecer en los últimos años, hasta representar en las cuentas públicas de 2022 cerca de un 35 por ciento del gasto corriente total de la institución. El próximo ejercicio se destinarán 26,6 millones de euros para pagar a la plantilla y los cargos políticos del gobierno insular, una cifra que se aproxima al dinero que gestionará la conselleria mejor dotada en el presupuesto, la de Bienestar Social con 28,2 millones de euros, o al montante inversor, que es de 28,9 millones.
Este es el séptimo presupuesto general del Consell elaborado por las fuerzas de izquierda, PSOE, Més per Menorca y Podemos, que gobiernan desde 2015, aunque en ese ejercicio todavía estuvo vigente el presupuesto confeccionado por el anterior ejecutivo del PP. El siguiente año, 2016, el gasto de personal aumentó a los 19,5 millones de euros y desde entonces la tónica ha sido la misma, el incremento en 2022 de este capítulo es del 7,20 por ciento respecto a 2021. En siete años el gasto de personal ha subido siete millones de euros.
El gobierno insular explica el aumento del año que viene en la subida salarial del 2 por ciento respecto a 2021, que viene marcada por el proyecto de Prespuestos del Estado para 2022.
Por otro lado, además de la plantilla de personal del Consell, en la que están incluidos los cargos públicos y que suma 22,9 millones de euros, este capítulo incluye personal contratado para obras y servicios, así como personal técnico y administrativo contratado con programas de ocupación. El coste de estos trabajadores es de 1.364.601 euros y 999.208 euros respectivamente, pero no es personal que figura en plantilla ni supone un gasto estructural, según justifica la memoria del presupuesto.
En el coste de personal influye asimismo la finalización en 2021 de parte del proceso de Oferta Pública de Empleo (OPE) 2016-2017; dicho proceso ha supuesto recuperar plantilla funcionarial y la reclasificación de 18 auxiliares de enfermería y de 14 auxiliares cuidadores, que pasan del subgrupo C1 al subgrupo C2, lo que hace subir sus retribuciones. Estos dos cambios permiten que se extingan algunas plazas laborales y del subgrupo inferior que aparecían duplicadas en las cuentas de 2021. Por otro lado, el Real Decreto Ley 14/2021 de 6 de julio, de medias urgentes para reducir la temporalidad en la ocupación pública, obliga al Consell a ejecutar una oferta con el fin de reducir la interinidad de aquí a 2024.
Seguir con ese proceso de estabilización de la plantilla y la normalización de la situación del personal fijo es uno de los cuatro ejes de trabajo que prevé el equipo de gobierno del Consell para 2022. Las otras líneas fundamentales son la creación de nuevas plazas, cambios de ubicación de algunas actuales y la eliminación de otras para mejorar la eficacia de la estructura de servicios; la puesta en marcha de la Agencia Menorca Talayótica, que supone la creación de un nuevo cargo de confianza, el de director de dicha agencia; y la búsqueda de Fondos Europeos.
El Consell tiene 506 empleados y 239 de las plazas son en propiedad. En las cuentas de 2022 aparecen 538 plazas pero 32 son las llamadas plazas espejo, duplicadas por el proceso de OPE pero solo una de ellas con consignación presupuestaria.