En 2022, el Ayuntamiento de Maó destinará 1.367.000 euros para la renovación del alumbrado eléctrico en varias zonas de la ciudad. Unas actuaciones que se incluirán en el proyecto integral para la mejora de la infraestructura, que se llevará a cabo en lo que resta del año y medio de legislatura.
La intención es acometer una profunda modernización de las infraestructuras. El alcalde, Héctor Pons, admite que «las instalaciones están obsoletas en muchas zonas de Maó, por el paso de los años y porque, durante mucho tiempo se ha hecho poco mantenimiento, por falta de medios, porque la ciudad ha crecido, o por no haber sido una prioridad». Así, «será la inversión más importante en, por lo menos, veinte años».
Para afrontar estas actuaciones, en los presupuestos para el próximo año se incrementará a 500.000 euros la partida para mejoras en la red eléctrica que en 2021 contó con 200.000 euros. Cantidad a la que se sumarán otros 867.000 euros de remanentes del servicio de recogida de basuras puerta a puerta, que el pleno aprobó modificar.
Cuatro primeros proyectos
Está previsto que a principios de 2022 puedan iniciarse los trabajos en cuatro zonas. En tres de estas se realizarán renovaciones totales, desde las canalizaciones a las farolas, pasando por los cuadros generales o los cableados. Es el caso del barrio del Molí des Pla, con intervenciones en tramos de las calles Infanta, Sant Manuel, Governador Ramírez, de la Reina, Sant Ciril, Campament o Sant Lluís Gonçaga. Los trabajos requerirán una inversión de 228.000 euros.
También completa será la intervención en la zona comprendida entre los cuarteles de Santiago y la Avinguda Menorca, sin incluir esta. Afectará a las calles Pedro Maria Cardona, Doctor Camps, Pasqual Calbó, Maria Lluïsa Serra y Bisbe Gonyalons. En este caso se destinarán 155.000 euros.
En el polígono industrial se acometerá igualmente una primera actuación, por valor de 301.000 euros. Concretamente entre las vías, enteras o parciales, del Cap Negre, el lado norte de Cap de Cavalleria, Era Alta, S'Esperó, Curniola y Dragonera.
Un cuarto proyecto es para la Avinguda Vives Llull en toda su extensión. En este caso, sin embargo, únicamente será una intervención parcial, con una inversión de 127.533 euros. Se trata de la renovación de la totalidad de las lámparas instaladas en la calle, pues presentan problemas de filtraciones y, cada vez que llueve, ocasionan cortes de luz.
Estos trabajos se financiarán con la modificación de crédito y se suman a los ya realizados este año, en lugares como Sa Mesquida, Es Murtar, Sa Costa de ses Piques o el Passeig Marítim. Además de las reparaciones, por 55.000 euros, que se han tenido que realizar de urgencia, por los efectos de los últimos temporales.